Conozca cómo Vietnam se ha convertido en un ejemplo de
éxito en la lucha contra la pandemia de Coronavirus que está dándole duro al
mundo entero.
El
brote del COVID-19 hizo que Vietnam desde un inicio tomara medidas
estrictas sabiendo que contaba con un sistema de salud deficiente. “País
precavido, vale por dos”, sería el refrán para esta nación.
Vietnam hizo todo lo contrario lo que la OMS recomendó.
La estrategia de este país fue considerada la más infalible contra la
enfermedad, pues debido a las cifras
oficiales no se registró ninguna muerte por el nuevo Coronavirus en todo el
territorio, haciendo posible el levantamiento
de la cuarentena.
Leer también:
Como
ya sabemos, la OMS se contradice en la
serie de informes y comunicados que saca constantemente a luz. Una de las
primeras contradicciones fue que a un
inicio no recomendó el uso de mascarillas para luego de un tiempo decir que sí
es indispensable ponérselas.
Jasper Verstreepen, belga
que trabaja como ingeniero civil en Vietnam, dijo que “la propaganda local empezó a
hablar del Coronavirus, y de golpe la población empezó a llevar máscaras, algo
que también hice, porque al salir a la calle siempre había alguien dándote de
forma gratuita. Había tipos con cajas de cartón ofreciéndoselas a los transeúntes,
en los bancos te las regalaban y hasta los taxistas te pasaban una”.
Vídeo: La exitosa guerra de Vietnam contra el Coronavirus
A Vietnam le valió un comino las palabras
de la Organización Mundial de la Salud cuando desaconsejó la puesta de mascarillas. De inmediato, se usó
obligatoriamente en el país. Y dentro de poco fue más en contra, desacatando
casi todas las disposiciones del organismo.
Vietman fue rápido en su accionar con la restricción de
viajes, poniendo una barrera impenetrable y asignar
aislamientos a cualquiera que ingresara al país, ya sea que vivieran allí o no.
Durante la primera semana de marzo, el servicio de visado gratuito a los
europeos desapareció de sopetón.
Pero
lo que hizo verdaderamente a Vietnam un país diferente al resto fue su íntegro rastreo de los casos positivos por
COVID-19 y la estricta cuarentena de cualquier contagiado o sospechoso de estar
infectado, es decir, todos los que pudieron estar cerca del enfermo eran
también aislados, incluso contra su voluntad.
“Se
han instalado parlantes en todos los postes de luz de la ciudad y se dieron avisos
y consejos frecuentes para protegerse del virus, y en tanto que la OMS dijo que
no eran necesarias las mascarillas, a fines de marzo nos obligaron en Vietnam”, recalca
Jasper.
Siendo
consciente del frágil sistema sanitario del país, las autoridades enfocaron sus
esfuerzos en llevar a cabo test masivos
y una búsqueda (rastreo) extremada de los contagiados. Temían de antemano
el colapso de los centros médicos (hospitales, clínicas, entre otros) si la
pandemia reventara si no se mantenía el control preventivo.
Ciertas
comparaciones atestiguan que Vietnam es
el país con mayor número de tests en el mundo. Ya para el 1 de mayo, este
país asiático tenía la situación en total control, y hasta la fecha solo se reportan 324 casos tras ser aplicados 260,000
pruebas y con decenas de miles de confinados, muchos hasta a la fuerza.
“Recuerdo el día en que uno de mis compañeros fue llamado
por el Gobierno porque detectaron que estuvo en un banco el mismo día que un
infectado”, declaró Jasper para El Confidencial.
A
base de tres niveles se realizó el
rastreo de personas cercanas a un contagiado. Los que eran personas
cercanas a los casos positivos eran enviadas a internarse en hospitales
militares o recintos universitarios, incluso se confinaba a cualquier persona
que estuvo cerca de una en riesgo o en sospecha de infección, aunque sea a
punta de golpe.
Vietnam, sin duda, es un
país de medidas extremas para situaciones extremas. Además es un claro
ejemplo que ser blando con la población no sirve de nada, pues no solo es
hablar, es también actuar. Ya muchos
países de Latinoamérica, como Brasil o Perú, tal vez necesitaron eso desde un
principio; sin embargo, ahora ya es demasiado tarde para eso, sería pecar
de imprudente o déspota, pero, más que todo, cruel, ya que el hambre y el desempleo hacen gran mella.
Fuente: Wapa
0 huellas:
Publicar un comentario
Deja tu huella y sabré que alguien pasó por aquí...
No se publicarán comentarios fuera de la temática del blog, ni mensajes que sólo tengan como interés hacer publicidad, o que contengan agresiones o insultos de cualquier tipo.
Además, no es necesario que escribas el mismo comentario; éste será aceptado o rechazado una vez sea revisado: